Prensa de guerra: Asturias, 1936-1937

Milicianos republicanos en las inmediaciones de Oviedo

La Guerra Civil que se desató en España a raíz del alzamiento del 17 de julio de 1936 no podía dejar de afectar a Asturias, sobre todo durante los quince meses que tardó el bando nacional en controlar la región. Para conocer el desarrollo de los hechos contamos con variedad de testimonios, desde versiones de los protagonistas, hasta material periodístico, sobre todo prensa escrita, que circulaba en aquellos difíciles días no sin contratiempos. Es precisamente esta información la que servirá de base a este trabajo pues, aunque hay que tener en cuenta el contexto en que se desarrollaba y los fines que perseguía, no deja de una fuente interesantísima para conocer lo sucedido y comparar el tratamiento que de un mismo hecho hacía cada bando.

Región, 16 de septiembre de 1936

Desde sus orígenes, la prensa escrita ha conocido muchas idas y venidas hasta llegar a convertirse en lo que hoy en día conocemos y manejamos con total naturalidad. En este sentido, la caída del Antiguo Régimen puede considerarse un punto de inflexión, pues el fin de las viejas estructuras de control supuso, entre otras cosas, el desarrollo de un nuevo tipo de prensa: al mismo tiempo que se configuraba como un medio al servicio de la política y la transmisión de una determinada ideología iba evolucionando hacia lo que en el siglo XX se denominarían medios de comunicación de masas.

Milicias, 24 de enero de 1937
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Sin embargo, la prensa asturiana de la primera mitad del siglo XX poseía ciertas características que hacían que su situación fuera diferente a la de otras publicaciones del país. Esto se debía principalmente a la situación creada en Asturias tras la Revolución de Octubre de 1934, que había impuesto una rígida censura principalmente en la prensa de izquierdas, de manera que la prensa conservadora (El Carbayón, El Comercio, Región, La voz de Asturias) era mucho más abundante que la progresista (La Tarde, Avance). Esta situación, en cambio, se invertirá en el transcurso de la guerra pues como veremos, la prensa de izquierdas será más abundante aunque más efímera.

Avance, 06 de enero de 1937

Es precisamente la situación social asturiana previa al conflicto uno de los elementos que más influyeron en el distanciamiento ideológico de los dos bandos enfrentados en 1936. Y es que, tras los sucesos del 34 había aumentado de forma considerable la presencia de la ideología derechista en la prensa como rechazo de lo ocurrido, a pesar de que luego el mayor apoyo popular en la región había recaído del lado gubernamental. Al mismo tiempo, la prensa de este periodo que va desde julio de 1936 hasta octubre de 1937 estará condicionada por los avatares de la guerra: todos los diarios verán reducida su extensión por la escasez de papel y las noticias sobre el conflicto ocuparán la mayor parte de las páginas, algunos periódicos incluso tendrán que cambiar su lugar de edición para poder sacar sus ejemplares a la calle y los cortes de luz (sobre todo durante el cerco de Oviedo) también entorpecerán la labor periodística. Será justamente ahora cuando ésta se vea más cuestionada, pues la propia situación de guerra convertirá a los diarios en elementos al servicio de uno u otro bando, fortaleciéndose la prensa de partido y aumentando el adoctrinamiento ideológico y el ataque indiscriminado al contrario.

El inicio de la contienda provocó cambios a todos los niveles en la vida asturiana y la prensa no podía ser una excepción. Los diarios que operaban hasta aquel momento en la región sufrirán profundas modificaciones en la forma y el contenido, siendo más evidente esta reforma en los noticieros del bando republicano, mientras que otros incluso desaparecerán, como es el caso del católico El Carbayón.

CNT, 12 de septiembre de 1937
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Así, la situación prebélica se invertirá: mientras los diarios conservadores eran más numerosos en los meses anteriores al conflicto, con el estallido de la guerra surgirán en el bando republicano gran cantidad de publicaciones, condiciones que no solo son aplicables en Asturias, sino que se extienden a la totalidad del país. Fleites Marcos (Prensa y Guerra Civil en Asturias, 2008) recoge en este sentido un cálculo  realizado por Salaün sobre las publicaciones de uno y otro bando a nivel asturiano y nacional. Frente a solo 4 publicaciones del lado nacional aparecen 31 periódicos republicanos, de los cuales solamente 1 existía antes del inicio del conflicto armado. A nivel nacional la situación se repite pues, frente a los 1.376 títulos republicanos sólo aparecen 223 diarios afines a los sublevados, aunque hay que tener en cuenta que el período analizado es más amplio en el caso de España (julio de 1936 - abril de 1939) que en lo referente a Asturias (julio de 1936 - octubre de 1937).

El Comercio, 08 de octubre de 1936

Del mismo modo, las circunstancias en que se desarrollan los periódicos de los dos bandos están íntimamente relacionadas con las facciones a las que se vinculan, pues, mientras el lado nacional cuenta con un mando unificado y una prensa prácticamente asimilada, el lado republicano incluye una prensa tan numerosa como numerosos fueron los comités que surgieron a lo largo de todo el territorio asturiano.

La Nueva España, 02 de abril de 1939

Por otra parte, algo en lo que coincidirán ambos grupos contendientes será el intento, casi desde el primer momento, de controlar algún tipo de publicación para utilizar en su favor las características que un medio de comunicación de largo alcance, como es el periódico, podía ofrecer. Con ese objetivo surgirán la mayor parte de los diarios que aparecen en este momento, de manera que la llamada «prensa de partido» cobrará importancia respecto a la comercial, sobre todo en el ámbito republicano.

Igualmente, una observación algo más detallada sobre los diversos diarios puestos en circulación en la etapa bélica puede aclarar la óptica con la que unos y otros trataban el desarrollo del conflicto.

Más información: El periodismo en la Guerra Civil.